Hoy, me desperté muy temprano ya que era el cumpleaños de Dei. Me cambié, sin hacer ruido, y me puse muy guapa, sí, este día es de esos días en los que te sientes genial contigo misma, y me siento muy bien.
Desperté a mis padres para decirles que iba a comprar el desayuno favorito de Dei, y les dije que no lo despertaran. Así que cogí el bolso y salí de casa.
Por el camino, aproveché para llamar a Harry.
+¿Hola?- dijo una voz más rasgada de lo normal. Estaba dormido.
-Siento haberte despertado, pero bueno... Buenos días.
+¿Sabes?-dijo mientras se estiraba- El mejor despertar que puedo tener el escuchar tu voz.
No pude evitar soltar ese: Awww.
El rió.
+Y bien... ¿Qué haces despierta tan temprano?
-Es el cumpleaños de Dei, así que salí a comprarle su desayuno favorito, cuando desayunemos, le daré su regalo. Y ya que estoy, te aviso de que a lo mejor esta tarde no podré hablar contigo... Ya sabes, vienen unos amigos de Dei a casa, jugarán a la Play Station y todo eso, y yo tengo que estar con Dei y ayudar a mi madre con la comida, que estos chicos comen como si mañana se fuera a acabar el mundo.
+¿Sabes?Eres la mejor hermana del mundo... No, no, no solo la mejor hermana del mundo, sino la mejor persona del mundo. Pero ahora me toca avisarte a mi de una cosa... Esta tarde hablarás conmigo sí o sí. Además, seguro que esos chicos no comen tanto como Niall.
Reí.
-En lo de los chicos y Niall tienes razón. Pero no soy la mejor persona del mundo, siempre hay gente mejor, que dona sus ingresos a grandes ONG's, y esas cosas. Y... A ver Harry, voy a intentar hablar contigo, pero no creo que pueda hacerlo por videocámara.
Llegué a McDonalds y pedí un desayuno para 4, y que mientras tanto me dieran un café.
+Lo que cuenta es la voluntad, no lo que donen, y muchas de esas personas donan dinero sólo por donar, y no dan ni la mitad de sus ganancias. Ah, y yo sé que tu eres muy inteligente y sabrás arreglartelas para hacer la videollamada.
-Vale, tienes razón, pero sigo sin ser la mejor persona del mundo, y no hablemos más del tema, porque tu eres muchísimo mejor que yo en todo. Y ok, intentaré hacer todo lo posible.
+Hummmm, eso habrá que verlo- dijo con un tono sexy refiriéndose a la primera parte de lo que dije.
Me atraganté con el café y empecé a toser... La gente me miraba.
+¿Estás bien?- dijo Harry preocupado.
-Sí, sí, estoy bien- dije aclarándome la garganta.
+¡Pensé que te iba a dar algo!
-En eso estaba... - dije riéndo.
+¿Y por qué te pusistes así?- dijo con un tono divertido.
-¿Tu estás preguntando mucho, no?- dije riéndo.
El rió.
+No, no, pero en serio, ¡dimelo!
Me sonrojé mientras cogía el desayuno y cogía el camino hacia mi casa.
-Tú sabes porqué me ahogué.
Sentí como sonrió.
+Y me gusta...
Seguimos hablando por todo el camino haicia casa, colgué, y entré a mi casa, mi hermano seguía durmiendo.
Dejé el desayuno y hablé con mis padres, ellos cogieron sus regalos y yo cogí mi regalo, traído de Inglaterra.
Lo despertamos, le dimos los regalos y fuimos a desayunar, él estaba super felíz.
Al medio día, después de almorzar, empezamos a preparar todo para la fiesta, no iba a ser gran cosa porque iba a ser en casa, pero me gustaría que sea como a él le gusta, así que hize todo lo mejor posible.
Platos de comida por aquí y por allá, confetti por todas partes, globos, etc.
Después, me fui a duchar y me puse esto:
http://www.polyvore.com/cgi/set?id=42617092&.locale=es
+Oh, estás preciosa- dijo mi hermano abrazándome.
-Oh, Dei, ¿pero te has mirado a un espejo?
Dei rió.
+Gracias a Dios que estás aquí- dijo volviendo a abrazarme.
+Te quiero.
-Y yo a tí.
Empezaron a llegar los amigos de Dei, quizás yo no conocía a 2 ó 3, los demás eran los de siempre, los conocía desde que era pequeña.
Me presentó a los amigos que no conocía y luego empezaron a hablar, mamá y papá salieron, ya saben... No es muy divertido tener una fiesta con tus padres aquí, así que ellos hoy no se iban a quedar aquí.
Antes de salir, papá, como siempre, le dijo a Dei:
+Cuídala- señalándome a mí.
Dei asíntió y abrazó a mis padres.
Empecé a traer la comida y todo eso, por lo visto los chicos estaban hambrientos, encendí el ordenador y le envié un sms a Harry para que se conectara.
Al instante se conectó.
Me puse los auriculares con el micrófono y empezamos la videollamada.
Me coloqué en una esquina, sentada en una silla con el ordenador en las piernas.
+Hay mucho ruido, ¿no?
-Bastante, pero todavía los chicos están jugando al fifa... Espérate a que jueguen al singstar... ahí moriremos, créeme.
Harry empezó a reír.
+Dale el felíz cumpleaños a tu hermano de parte mía y de los chicos.
-Lo haré... cuando se desocupe- dije sonriéndo.
+Por cierto, estás muy arregladita, ¿no?... ¿Por qué no te levantas para verte por completo?- dijo mordiéndose el labio.
Me sonrojé.
+¡En serio, levantante para verte, porfa!- dijo con voz de niño pequeño.
-Esta bien... -dije colocando mi ordenador en la mesa.
Me levante, me alejé para que me pudiera ver, me volví a sentar y me puse los auriculares de nuevo.
Estuvo sin decir nada durante unos minutos.
Se me estaba acabando la paciencia.
-¿Harry?
+W-o-w.
-¿Qué?
+Que no tengo palabras.
Me sonrojé.
Intenté cambiar de conversación.
-Estoy segura de que este suéter le gustaría a Louis- dije señalándo mi suéter de rallas marineras.
+Creeme, a mí me gusta más.
Me volví a sonrojar... ¿es que no puede parar de hacer eso?
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