#HCWYLEI Capítulo 102

¡Hola precioooosaaaas!
Pues aquí les dejo el capítulo 102.
No sé ni cómo ni dónde saldrá la foto que he puesto porque estoy subiendo este capi desde el móvil, pero el caso es que es el póster oficial de “This is us“, la próxima película de One Direction en 3D. ¡Se estrenará en verano!
Bueno, espero que les guste y gracias por leer<3
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Me desperté con el sonido de mi móvil. Dios, ¿qué hora es?¿las ocho?
Miré el móvil y ví que la llamada entrante era de Harry. Sonreí y lo cogí rápidamente.
-Hola.- Murmuré, con los ojos cerrados y echada en la cama. No tengo ganas de levantarme.
+¡Cumpleaños feliz, cumpleaños feliz, te deseamos todos, cumpleaños feliz!- Cantaron esas 5 voces que tanto amo y 4 voces más. Sí, adivino que una de ellas es James, porque su voz es rasgada y preciosa, me encanta; la otra voz era Hil; escuché a Kate y, si no me equivoco, la otra voz era de Marc, el novio de Kate.
-Oh, ¡qué sorpresa!
+¿Qué tal estás, cariño?- Dijo Harry dulcemente.
-Bueno, estaba en mi quinto sueño hasta que me han despertado.- Dije riendo e intentando no quedarme dormida.
+¡Ya tienes diecisiete años!- Dijo Liam.
-¡Sí, es verdad!
Ya tengo la misma edad que Harry, aunque solo será por tres o cuatro meses.
+¡Hoy te veremos todos!- Dijo Kate.
-¿Y cómo irán todos a la playa?
+Pues Harry irá contigo, Louis llevará a los chicos y Kate nos llevará a Marc, a James y a mi... O a lo mejor Liam también los lleva, no sé.- Dijo Hil.
-¿Y cómo llevará Louis a los chicos?- Dije perdida.
+Alquilaremos un coche y seguirá a Kate por el camino.- Dijo Zayn como si fuera obvio.
+Sí, y ya Kate sabe qué camino cojer para que no nos sigan los paparazzi.- Dijo James.
+Por cierto, la playa esa es preciosa... Kate y yo fuimos por varios caminos para ver cual era el más complicado y la verdad es que nunca había visto nada igual.- Dijo Marc
-Lo sé, es muy bonita. A esa playa casi no va gente porque no la conocen y está muy alejada de las zonas de recidencia; por eso la elegí, no quiero paparazzi ni nada de eso. Mis amigos de aquí no están acostumbrados a eso y no quiero que se acostumbren... Quiero privacidad; además, quiero que estén todos.
+Me parece una buena idea.- Dijo Lou.
+Bueno, la verdad es que deberíamos dejarte dormir más, cariño, porque tienes voz adormilada todavía.- Dijo Hazza.
Suspiré y me estiré.
-Pues estaría bien.- Dije poniéndome en una posición más cómoda, de lado.
Todos rieron.
+Bueno, pues que disfrutes de tu descanso, luego te veremos. ¡Feliz cumpleaños!- Dijo Niall.
Todos me gritaron “¡Feliz cumpleaños!“ a la vez y se despidieron.
Hazza se quedó ahí.
+Me encantaría haberte despertado yo en este día tan especial.- Dijo Harry.
-Lo has hecho, Hazza.- Dije riendo.
+Pero hubiera sido mejor si te hubiera tenido entre mis brazos.
Sonreí.
-Hubiera sido mucho mejor.- Susurré.
Es tan confortable estar entre sus brazos. Se siente tan bien... Y está en un hotel.
+Te voy a dejar dormir más, ¿vale,  cielo? Descansa, que hoy va a ser un buen día.- Dijo dulcemente.
-Sí, voy a dormir un poco más porque estoy recuperando energías. Te quiero mucho.
+Yo también te quiero mucho. Por cierto, ¿nos vemos a las 12 en el local para almorzar?
-Sí, a las 12.- Balbuceé mientras mis ojos se cerraban.
+Descansa, cariño.- Susurró.
En un día mejor, él me susurraría eso mientras me abrazaría fuertemente y me quedaría dormida con mi cabeza apoyada en su pecho.
-Tu también.- Susurré.
+Te quieero mucho.
-Y yo a tí.
Colgamos.
Me quedé dormida de nuevo en un profundo sueño hasta que sentí que me volvían a cantar el cumpleaños feliz. No sé porqué pero odio esa canción.
Sonreí, abrí los ojos y me desperecé mientras mi madre me ponía el desayuno encima, en una bandeja.
-¡Oh, no teneían por que molestarse!- Dije mirando a mi hermano, luego a mi madre y por último a mi padre.
+¡Es tu cumpleaños!- Dijo Dei transmitiéndome su felicidad.
No cabe duda que no hay mejor hermano que él. Lo adoro.
+¡Venga, que te hemos hecho tu desayuno favorito, pruébalo!- Dijo papá.
Reí y empecé a comer las tortitas con Nutella.
-Mmm, ¡está buenísimo! Pero...
+¿Pero?- Dijo mamá alzándo una ceja.
-¿Pero voy a desayunar yo sola? Es decir, ¿ya han desayunado?
+¡Por supuesto!-Dijo mamá.- ¿Cómo decirle a David y a tu padre que no coman durante la  media hora mientras te hacía el desayuno? Tuve que volver a hacerte el desayuno porque ellos se lo comían todo.- Dijo mamá mirando a Dei y a papá mal.
Reí y seguí comiendo.
También me han hecho un batido de fresa. Me encanta.
Cuando terminé, llevé al bandeja a la cocina.
+Los regalos te lo daremos luego, en el almuerzo.- Dijo papá.
-¡¿Regalos?!¡No!¡No tenían que comprar nada!
+Lo cierto es que te van a encantar dos o tres de ellos.- Dijo Dei.
+¿Y los demás?- Dije frunciendo el ceño.
Rieron.
+Te van a gustar todos, pero habran algunos que te gusten más que otros.- Dijo mamá poniendo los ojos en blanco.
Reí.
+Bueno, vete a duchar porque en una hora tienes que estar lista.- Dijo papá.
Reí.
Saben perfectamente que tardo muchísimo en arreglarme.
Cogí mi ropa y me fui a la ducha rápidamente.
Encendí la radio, me quité la ropa y me sumerjí en esas gotitas de agua caliente que tanto me tranquilizan mientras escuchaba “Los 40 Principales“.
Dios, intento que no sea así, pero de aquí, echo todo de menos. Tanto a la gente como a mis amigos, familia y hasta la radio, aunque en Inglaterra sea mejor la radio.
Mientras me quitaba el champú, dijeron en la radio “Y ahora, una chica que está arrasando en las listas Británicas“, y de repente, pusieron una canción mía.
Dios mio.
Abrí los ojos de la impresión y me entro champú en los ojos.
-¡MAMÁ, PON LOS CUARENTA PRINCIPALES, CORRE!- Grité desde la ducha.
Escuché cómo mamá encendía el Home Cinema y se escuchaba “I‘m with you“, la canción a la que ya tenemos el vídeo casi listo.
Sentí cómo los ojos se me llenaban de lágrimas, y no era precisamente por el champú que me ha entrado.
Mi música está llegando a otros países. No me lo puedo creer. Todo va tan bien...
Suspiré e intenté borrar la sonrisa que tenía en mi cara, pero no podía.
Termine de ducharme, me cambié y me arreglé.
Bien, estoy lista.
Salí del baño y ya todos estaban listos.
Miré a mi madre, que estaba preciosa. Tenía puesto unos vaqueros, una camisa blanca, unos taconazos de sandalia rosa pastel y un collar del mismo color, de esos larguísimos, y el pelo suelto, corto. Su maquillaje era sencillo y bonito, como ella.
Me quedé mirándola.
-¡Uau, mami, estás preciosa!- Dije abrazándola.
Rió.
+¿Y tú te has visto, (Tn)______? Cada día estás más guapa, y yo creía que eso iba a ser imposible.- Dijo mamá.
Sonreí... Las madres siempre miran con esos ojos... De madre.
Papá y Dei también estaban bastante guapos. Iban con vaqueros y camisa.
Estoy segura de que Dei debe de tener a las chicas derritiéndose en la universidad porque es realmente guapo.
Salimos de casa y fuimos al coche.
Más paparazzi. Madre mía, aquí son peores que en Inglaterra.
Les dimos esquinazo y los perdimos de vista. ¡Bien!
Cuando llegamos al local reservado, Harry estaba ahí, de pie, tan guapo como siempre.
Iba con una camisa de cuadros verdes y azules que resaltaban sus ojos verde grisáceos; unos vaqueros; unas convers negras y su precioso pelo revuelto.
Sonreí cuando me vió y él me respondió con esa sonrisa de ángel mientras sus ojos analizaban cada centímetro de mi cuerpo.
Me sonrojé y miré a mi familia que, por lo visto, no se han enterado de la inspección que me está haciendo mi novio con esa mirada.
Fuí hasta él y me dió un beso en la mejilla. Luego colocó su mano en mi cintura y saludó a mi familia dándoles la mano.
Papá parece un poco incómodo, pero supongo que es normal. En cambio, mamá y Dei hablan con él animadamente mientras comemos.
Me encanta verlos así. Papá poco a poco se acostumbrará a el hecho de que su hija ya no sea una niña, estoy segura.
Harry pidió permiso y se levantó para hacer una llamada.
Seguramente estará llamando a Anne para ver qué tal está.
Cuando llegó, terminamos de comer.
+Creo que deberíamos darte tu primer regalo.- Dijo papá.
¿Primer regalo?
Mamá se levantó y me dió un paquete grande, envuelto.
+¡Vamos, ábrelo!- Dijo Dei.
Miré a Harry y me sonrió. Sabe lo que hay ahí dentro.
Suspiré y empecé a desenvolverlo.
Cuando terminé, inspeccioné el paquete.
-¡Es una cámara Canon de última generación!- Dije emocionada.
+¿Te gusta?- Dijo mamá.
-¡Me encanta!- Grité y los abracé a todos. Incluso a Harry.
+¡Abre el paquete, vamos a hacer que funcione!- Dijo Harry.
Abrí el paquete, metí la memoria en la cámara, le puse las pilas, la arreglé, la encendí, la configuré y le tomé una foto a Harry de perfil.
Rió.
+¡Eh, a mi no!
Reí y le saqué fotos a mi familia.
Y de repente empecé a escuchar el cumpleaños feliz de nuevo, pero esta vez, habían dos voces diferentes.
-¡Violet!¡Scarlett!- Grité y salté de mi silla, dejando la cámara encima de la mesa, para abrazar a esas dos a las que he echado tanto de menos.
Rieron y, mientras seguían cantandome el cumpleaños feliz, me abrazaron.
-¡No me lo puedo creer!- Dije riendo, aguantando las lágrimas.
Louis y Liam traían una tarta muy grande entre los dos, con la portada de mi CD y diecisiete velas.
Abracé a Hil, a James, a Marc, a Kate y a los chicos y miré a mi familia.
Dei no paraba de tomar fotos con la Canon.
+Es cosa de él.- Mamá señaló a Harry mientras reía.
Sonreí y le abracé muy fuertemente.
Apoyé mi frente en la suya.
-Eres tan bueno. Dios, eres increíble.- Susurré.
+Sólo hago lo que siento que tengo que hacer, porque te quiero.-Susurró.
Cerré los ojos. El amor que siento por este chico es abrumador.
+Tengo muchas ganas de besarte,  pero tu padre me matará si lo hago.- Dijo en voz más bajita aun.
Reí.
-Yo también tengo muchas ganas de besarte.- Susurré.
Le dí un besito en la mejilla y me separé.
Los chicos habían juntado las mesas y habían puesto sillas para todos.
+Bueno, cumpleañera, sopla las velas... Pero antes, pide un deseo.- Dijo Niall.
Sonreí y cerré los ojos.
“Deseo que nada de esto cambie“, y soplé las velas.
+¡Tienes que cortar la tarta!- Dijo Violet.
Sonreí y corté tarta para todos, aunque queda muchísima todavía.
Dei, Niall y Violet comieron más tarta.
Me encantó ver cómo Dei hablaba con Niall y Violet acerca de lo buena que estaba la tarta.
Mamá y papá, en cambio, hablaban con Hil, James, Kate y Marc.
Siento que estoy rebozante de alegría al verlos todos unidos.
+No se te ha quitado esa sonrisita tan bonita de la cara.- Me susurró Harry.
Reí.
-Oh, Hazza, es que ver a todos así, tan unidos, es tan... Reconfortable. Me siento realmente bien.- Susurré.
+Y al final te has puesto el conjunto que yo he elegido.-Dijo Harry con esa sonrisa pícara.- Te queda genial.
Me sonrojé.
-Gracias.- Murmuré.
+Me encantan tus piernas.- Susurró colocándo su mano en mi rodilla. Di un respingo. Todos estaban hablando entre ellos así que no notaban nada. Además, su mano estaba por debajo del mantel.
-Harry, hay gente.- Murmuré, mirándolo mal.
+Oh, no me mires así, que luego me tendré que levantar y...- Miró hacia abajo, hacia su entrepierna.
Abrí mucho los ojos y quité su mano de mi pierna.
-Estate quieto, Harry.- Susurré.
No lo voy a llamar Styles. Sé el efecto que tiene en él saber que estoy enfadada.
+Hmmmm.- Dijo Harry mientras volvía a poner su mano en mi rodilla y me acariciaba la pierna suavemente desde la rodilla hasta la tela de la falda.
Suspiré entrecortadamente.
Dios, ya siento muchísimo calor.
-¡Harry!- Dije en voz bajita.
+¿Qué?- Susurró sonriendo.
-¡¿Qué haces?!- Murmuré, mirando su mano y luego mirándolo a él.
+Preguntarme qué ropa interior puedes estar llevando ahoramismo.- Me susurró al oído.
Me puse como un tomate. Un rubor de excitación y de vergüenza se apoderó de mi cara.
+¡Te toca abrir los regalos, (Tn)______!- Dijo Dei emocionado.
Harry quitó su mano de mi pierna en el momento en que escuchó su voz.
+¡Dios mío, pero si estás como rojísima!¿Te encuentras bien?- Dijo Louis.
-Erm... Sí, es que hace mucho calor. Supongo que es porque ya me he acostumbrado al frío de Gran Bretaña.- Dije mirando a Harry, así sólo él notaría la mentira que me ha hecho decir.
Él intentó ocultar su sonrisa.
Es un cabrón, sí, así de simple.
+Sí, es verdad, hace calor aquí.- Dijo Zayn.
Asentí.
Scarlett lleva puesto un vestido muy bonito que se adapta a su cuerpo gracil y a la vez atlético, que la hace tener mucha clase, y parece tener calor; y Violet lleva una minifalda vaquera que le resalta sus curvas tan bonitas y pronunciadas, y también parece que tiene calor, así que no soy la única.
+Pues qué rápido te has acostumbrado al frío, porque yo siento que estoy en el paraíso.- Dijo Kate.
Reí, intentando disimular.
Luego vinieron Kate, Marc, Hil y James y me dieron un regalo. Dijeron que es departe de todos pero que realmente lo he hecho yo. Me han dejado confundida.
Empecé a desenvolverlo.
Es grande. Parece un marco de fotos muy grande.
+¡Que no se te caiga!- Dijo mamá.
Fruncí el ceño y seguí desenvolviéndolo. Levanté la vista y todos me miraban con los ojos brillantes... Pues nada, aquí todos se enteran de todo menos yo.
+Oh, por Dios, ¡rompe el envoltorio!- Dijo Hil histérica.
Puse los ojos en blanco al ver que todos le daban la razón y arranqué el envoltorio.
Lo miré una y otra vez, sin parapadear y boquiabierta.
Es un disco de platino por las ventas de mi CD. Oh, Dios mío.
+¿Y bien?- Dijo papá, intentando descifrar mi expresión.
-Oh, Dios mío.- Dije mientras me temblaban las manos.
James cogió rápidamente el marco, con una sonrisa de oreja a oreja, sabiendo que no tengo muchas fuerzas.
Las ventas han tenido que ser muy altas... Muy, muy, muy altas.
Rápidamente me quité una lágrima que me caía por la mejilla. De verdad que no quiero llorar pero cada vez me lo ponen más difícil.
+No ha sido un “regalo“- Dijo Kate resaltándo las comillas con los dedos- porque tú lo has conseguido, y todos estamos muy orgullosos de tí. Sólo queríamos darte la noticia.
Me abrazó.
-No es cierto.- Dije negando con la cabeza- Si no fuera por todos ustedes y por las tres personas que faltan, no hubiera conseguido todo esto. El apoyo que he recibido de parte de todos ha sido muy confortable, y nunca me han dejado de apoyar. Esto no solo me pertenece a mí -señalé el cuadro con el disco de platino- sino también a todos ustedes, y sobretodo a tí y a tí- dije señalando a James y a Hil.
James le dió el cuadro a Niall.
+Sobretodo te lo mereces tú, porque eres la cantante principal.- Dijo mientras me abrazaba.
Me apretó fuertemente y luego me soltó. Hil hizo lo mismo y poco a poco me abrazaron todos, hasta mamá, papá, Dei y Harry.
Después, cada uno me dió un regalo: ropa, complementos, cd‘s y esas cosas, los típicos regalos que, al fin y al cabo, me encantan.
Harry era el único que quedaba y, sinceramente, no me espero nada de él; ya ha hecho muchísimo por mi... Pero todos nos miraban y estaba empezaba a ponerme nerviosa. ¿Por qué todos nos miran? A lo mejor se piensan que él tiene algo especial para mí.
Harry se acercó a mí y me sonrió.
Dei me ponía aun más nerviosa porque no para de sacar fotos.
+Es mi turno.- Murmuró Hazza y se encogió de hombros.
-Pero...
Me interrumpió negando con la cabeza y sonriendo.
+Tú y tus “pero“.- Dijo sonriéndo.
Reí.
Me cogió de la mano y la sujetó en alto. Luego metió la mano en su bolsillo y sacó algo.
Una pulsera. Una pulsera preciosa. Tiene pequeños colgantes que suenan cuando se mueve; es plateada, supongo que de oro blanco porque no parece plata. Luego me la puso y me besó la mano.
+Espero que te parezca bonita.- Dijo sujetando mi mano frente a nuestras caras.
-Es preciosa... Perfecta.- Murmuré con un nudo en la garganta.
Bajó nuestras manos, todavía unidas y con la otra mano me quitó una lágrima, la cual no me había dado cuenta que estaba cayendo.
+Como tú.- Susurró y me dió un beso en la mejilla.
-Gracias.- Murmuré y lo abracé.
+Un beso estaría bien.- Susurró.
No lo puedo besar porque está mi familia aquí y él lo sabe.
Suspiré y me acordé de una cosa. Sonreí.
Hace un rato Harry quería saber la ropa interior que yo llevaba.
Le di un beso entre la mandíbula y el cuello.
-Blanca y de encaje.- Le susurré al oído.
+¿Qué?- Susurró con el ceño fruncido.
-Querías saber qué tipo de lencería llevo. Es blanca y de encaje.- Volví a susurrarle al oído y apretó su mano en mi cadera.
Me separé de él y todos quisieron ver mi pulsera. Por lo visto, el único que la había visto antes era Lou.
+Bien hecho, tío, es muy bonita.- Dijo Zayn dándole una palmadita en la espalda.
Harry y yo estábamos cogidos de la mano mientras Violet, Scarlet y Hil examinaban mi pulsera.
+Gracias.- Dijo Hazza con la voz más ronca de lo normal.
Intenté no reír. Es culpa mía.
+¿Quieres un vaso de agua?- Le dijo Liam al oir su voz.
+Fría, por favor.- Dijo Harry con esa voz tan rasgada. Es tan sexy...
+Pero las bebidas frías no son buenas para la voz.- Dijo Liam.
+Fría.- Volvió a decir Harry con voz ronca y cortante.
+Está bien...- Dijo Liam.
+¡Oh, ya entiendo!- Dijo Zayn y se echó a reír. Luego fue y se lo contó a Louis.
¿Por qué son ellos dos los que siempre “entienden“ todo?
Louis y Zayn nos miraban con sonrisa pícara desde el otro lado del local.
Yo intenté hacer caso omiso a sus miradas y seguí hablando con las chicas.
Harry se colocó detrás de mi, todavía cogiéndome de la mano.
+Me encanta la lencería de encaje, pero me gustas más sin ella.- Me susurró al oído.
Abrí mucho los ojos y me sonrojé mientras sentía que el calor me subía por el cuerpo.
Me dió un beso en la nuca y volvió a ponerse a mi lado.
Liam le trajo el vaso de agua fría y yo me puse nerviosa.
Él bebió un trago de agua y dejó el vaso en la mesa, así que decidí beber yo, porque tengo un calentón por su culpa.
Suspiré e intenté coger el vaso con una mano, pero se me resbaló porque me temblaban las manos y se cayó el agua en la mesa.
Todos pusieron los ojos en blanco, ya que están acostumbrados a mis torpezas, pero Harry intentó ocultar su risa aclarándose la garganta y Louis y Zayn sonreían aun más, sabiendo porqué yo estoy así.
Joder.
Suspiré y le apreté la mano a Harry.
-Quien ríe el último ríe mejor.- Le dije sonriendo para ocultar mi cabreo.
+Tú intenta vengarte...- Murmuró, y amplió su sonrisa.
Cabrón.
+Bueno, chicos, es hora de irse a casa, que luego se irán al cumple de la playa.- Dijo mamá.
+Sí, y Harry se viene con nosotros.- Dijo Dei.
-¿Ah, sí?- Dije alzando una ceja. No lo sabía.
+Sí, te dijimos esta mañana que irían juntos a la playa.- Dijo Marc.
-¡Oh, es verdad!- Dije riendo.
Rieron todos ante mi emoción.
-¡Entonces genial!-Dije y apoyé mi cabeza en el hombro de Harry.
Él me abrazó desde detrás y sonreí, cerrándo los ojos.
De repente, sentí un “clic“ y escuché un flash.
Abrí los ojos aterrada. Mierda, ¡hasta aquí no pueden haber llegado los paparazzi!
Miré a mi alrededor y ví a Scarlett con mi nueva cámara en la mano.
+Es que tenía que captar ese momento porque era muy bonito.- Dijo encogiéndose de hombros.
Puse los ojos en blanco y reí.
-¡Me habías asustado! Creí que era algún paparazzi. Se me había ido el corazón a los pies.
+Lo hubieramos sabido arreglar o lo hubieramos superado.- Dijo Harry- De eso estoy seguro.
-Es verdad.- Dije sonriendo y le cogí de la mano.- Venga, ¡vamos a sacarnos fotos todos!
Y estuvimos un buen rato sacándonos fotos.
Sin duda, este está siendo uno de los mejores días de mi vida.
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Bueno preciosas, espero que les haya gustado.
Para el próximo capi me gustaría llegar a los 11 comentarios... Esperemos que los consiga >.<
¡Muchas gracias por leer, las amo!