Después de almorzar, Harry me llamó.
Hil puso los ojos en blanco mientras reía y cogí el móvil rápidamente.
Hablé un ratito con Hazza y estaba realmente emocionado, me dijo que en nada subirían el video de su nuevo single a Youtube, y yo me emocioné también. Además, comentó lo mucho que me echaba de menos y yo es que me muero por verle de nuevo.
Finalmente me despedí de él diciéndole que lo amo. Mi corazón late de manera desbocada cuando él me dice que me ama.
Hil abrió mucho los ojos. Sabe el significado que tiene esa palabra para nosotros porque yo lo había hablado con ella tiempo atrás, y ella nos entendía porque James y ella también tardaron tiempo en decirla.
+Voy a acabar bloqueándote las llamadas del móvil que vengan de Harry.- Dijo Hil riéndose.
-¡Pero es que casi no estamos juntos!
+¡Pero te desconcentra cuando estás trabajando!
-¿Y tú cómo te sentirías si no pasaras sino unas horas al día con James?
Hil me miró.
+Mal.
-Eso es lo que me pasa a mi.
+Pero que me sienta mal no significa que me desconcentre.
Puse los ojos en blanco y ella rió.
Esta mujer es un caso perdido.
+Venga, vamos, que tienes que ir a la radio.
Asentí.
Después de una maravillosa entrevista en la radio, en la cual me divertí muchísimo, nos pusimos en marcha para ir al estudio a grabar.
Hil puso el manos-libres en el coche e hizo una llamada.
Después de escucharla hablar un rato con varias personas y organizar mi mente, me dí cuenta de que estaba buscando a la mejor ginecóloga de Londres para mi.
Eso es un alivio.
Adoro a Hil.
Le dijeron los días y las horas a las que la ginecóloga podía atenderme.
Hil me miró.
+Elige tú. Si hay que cambiar algún evento de la agenda, lo cambio.
Miré la agenda en mi móvil.
-Mañana mismo nos viene bien.
Hil asintió.
+Ya la has escuchado.-Dijo aparcando.- Mañana a las 7 entonces. Gracias y buenas tardes.- Dijo y colgó.
Es tan profesional que me sorprende.
Entré al estudio y lo primero que hice fue coger mi guitarra para componer, pero mi productor me detuvo y me dijo que fuera a grabar.
Aish, pues yo vengo inspirada.
Grabé tres canciones enteras y me dejaron ir a por mi guitarra a tocar y componer.
Toqué unos acordes y empecé a escribir algunas frases.
Luego, Hil me dijo que era hora de ir a casa. No pensé que se me pasaría el tiempo tan rápido... Adoro la música. Es la mejor manera que tengo de expresarme, y me encanta.
Perdí la noción del tiempo mientras componía.
Hoy siento una felicidad tan indefinible...
Unas horas después llegué a casa y me encontré sola.
Odio llegar y que no haya nadie.
Dejé mi bolso en el sofá y fui a beber un vaso de agua cuando sentí cómo se abría el garaje.
¡Han llegado!
Terminé de beberme el agua y me dirigí a la puerta, pero los chicos entraron antes de que yo pudiera abrir la puerta.
+¡Hola, preciosa!- Dijo Liam y me dio un beso en la mejilla.
Luego entró Niall y me dio otro beso; después, Zayn y luego Louis.
Al final acabo llena de besos.
Tampoco me quejo, soy la chica más afortunada del mundo.
Por fin llegó mi chico, sonriendo.
Lo abracé rápidamente y me apretó con fuerza.
Sus abrazos son indescriptibles.
Me separé un poco para saludarlo o, mejor dicho, para decirle que lo extrañaba, y mucho.
-Te echaba de menos, Hazza.- Dije con suavidad.
Tenía ganas de acariciarle el pelo pero el gorro no me deja.
Sonrió y acercó sus labios a los míos.
+Y yo a ti, cariño.- Susurró.
Acercó su cara aún más a la mía e intenté echarme hacia detrás porque no sé si los chicos están ahí, pero me mordió el labio, atrayéndome a él, y ya no pude evitarle, así que me besó con suavidad.
Yo no sé ni cómo lo hace, pero me pierdo en él con mucha facilidad.
Después de besarme, apoyó su frente en la mía y sonrió.
+Los chicos están en la cocina, sirviendo la cena que trajimos.
Reí.
Me conoce demasiado bien.
-Es como si me leyeras el pensamiento.- Dije acariciándo su cuello.
+Ojalá que pudiera hacerlo de verdad.
-Pero si te digo siempre lo que pienso, Hazza.- Dije sonriendo.
Sus labios se curvaron y se hizo una media sonrisa en su boca.
+¿Estás segura?- Dijo con esa sonrisita de pillín.
-¡Claro!
+¿Y qué estabas pensando ahora?
-Que me pierdo en ti muy fácilmente.
Su sonrisa se hizo más brillante.
+¿Y ahora?- Dijo besándome el cuello.
-Que ya vas a hacer una de las tuyas.
Rió.
+Ves, tú también me lees el pensamiento.
+¡La cena!- Gritó Niall desde la cocina.
+¡Ya vamos!- Gritó Harry.
Me cogió de la mano y fuimos. La verdad es que no sé si entrar escondida detrás de él o qué hacer, porque los chicos ya sabrán lo de anoche y no quiero estar con ellos.
Cuando entramos, sorprendentemente los chicos estaban hablando y gastándose bromas entre ellos.
Me senté y hablaron conmigo como si nada.
¡No puede ser!¿Qué les pasa? Hasta Louis está tranquilo.
Es que es impresionante.
Después de cenar y hablar, fuimos casa e iba a ir a cambiarme de ropa cuando Harry me cogió del brazo.
+No te olvides de esto.- Dijo sonriendo.
Me dio ropa.
Fruncí el ceño.
-¿Qué es esto?
+Tu pijama.- Dijo sonriendo.
Lo miré.
-Pero, Harry...
+Vamos, cariño, póntelo...- Dijo interrumpiéndome.
Me está mirando con esos ojitos que...
Suspiré y puse los ojos en blanco.
-Está bien.- Dije, y me fui al baño mientras él sonreía.
Cuando salí del baño, él ya estaba en 'pijama'.
Hmmmmmm se ve tan bien así...
-Qué raro fue el comportamiento de los chicos.- Dije entrando a la habitación.
+¿Por qué?- Dijo Harry frunciendo el ceño.
Me estudió con la mirada.
-Porque se han comportado bien, y eso es raro.
Harry rió, sentado en la cama.
+Después de un buen alboroto y de hacer que me cabreara y que me pusiera celoso, puse orden.
Fruncí el ceño.
-No te has explicado muy bien.- Dije de pie, frente a él.
+No paraban de hablar de lo sexy que eres.- Murmuró con los ojos oscuros y mala cara.
-¡¿Yo?!
Asintió y se puso de pie.
Mmmmmmm.
+Hablaron de eso porque tenía que cambiarme de camiseta, ellos estaban conmigo y...
-¿Y?
Sonrió y se dio la vuelta.
-¡Oh, Dios!¿Te duele, Harry? Lo siento tanto... De verdad, lo siento muchísimo.- Dije rozándole la espalda con los dedos.
Tiene ocho arañazos... ¿Pero cuándo le hice yo eso? Oh, Dios...
+No, cariño, no me duele, tranquila...- Dijo dándose la vuelta.- Mas bien me encanta.- Una sonrisa sensual asomó en sus labios.- Es la marca más sexy que puede dejar una chica.
Me sonrojé.
-¿Pero te duele?
Me cogió por las manos y me acercó a él.
+Todo lo contrario... En realidad quiero muchos más arañazos tuyos.- Susurró, y rozó sus labios con los míos.
Sentí el calor apoderándose de mi cuerpo.
-Hazza... Estate quieto y termina de contarme lo de antes.- Susurré.
Sonrió.
+Bueno... Por eso me enfadé, porque los chicos se quedaron asombrados y empezaron a hablar y... Tú eres mía, una gatita mimosa que saca sus garras y se convierte en una tigresa.- Dijo acariciándome la mejilla.
Me sonrojé aún más.
-Menuda comparación.- Murmuré.
+Hmmm, no me quiero ni imaginar cómo será cuando tengamos más práctica y tú no tengas tanta vergüenza.- Dijo pegándo su cadera a la mía.
Nunca se me va a quitar la vergüenza. Imposible.
-¿Y qué le dijiste a los chicos?- pregunté para rodear un poco el tema.
Sonrió y negó con la cabeza. Sabe que no quiero tocar ese tema.
+Me enfadé mucho y dije barbaridades que una princesa como tú no debería de escuchar y, finalmente, me prometieron que no comentarían el tema frente a ti.
Mi sonrisa se hizo gigante.
Me imagino a Hazza en ese momento hecho una furia; cuando se enfada es tan imponente... Uf, es que me encanta.
-Así que mi chico duro pudo amansar a sus amigos... Increíble.- Murmuré contra sus labios, sonriendo.
+Tu chico duro es más blando que el algodón de azúcar con su novia.- Dijo riendo.
Reí.
-Es por amor.- Susurré, todavía riendo.
+Sí, es porque te amo, (Tn)______.- Dijo muy cerca de mis labios, y se mordió el labio inferior mientras me miraba a los ojos.
Mi corazón se saltó un latido.
No sé describir cómo me siento cuando él hace esas cosas... Es como si me fuera a desmayar... Como si estuviera volando. Es, sencillamente, impresionante.
Colocó una mano en la parte de detrás de mi cuello y la otra mano la colocó en la parte baja de mi espalda.
Me mordió el labio y me acerqué a él.
Necesito que me bese, por Dios.
Pasé mis brazos por detrás de su cuello, intentando atraer su cara a la mía.
Sonrió.
+Estoy esperando una respuesta, cariño.- Dijo lamiendo mi labio.
Me mordí el labio.
-Yo también te amo, Harry.-Susurré.
Sonrió.
+Hmmmm, me encanta como suena eso.- Susurró contra mis labios, y rozó sus labios con los míos.
Suspiré.
Me dio un beso suave en la parte derecha de mis labios; luego, uno en la parte izquierda.
Temblé.
¿Cómo es que tengo tanta necesidad de él?
Me apreté a él, buscando sus labios de una vez por todas, intentando atraer su cara apretando mis manos detrás de su cuello.
Sentí cómo mis pechos se pegaban a su pecho, y me sonrojé. No me gusta la tela fina de sus camisetas.
A Harry se le oscurecieron los ojos y me apretó a él. Entonces, por fin me besó y lo abracé.
Hizo un sonido de gusto y me mordió el labio.
Gemí.
-No juegues conmigo, Harry- Susurré contra sus labios.
Hizo que me acostara y se colocó encima de mi, dejando caer su cuerpo y sonriendo abiertamente.
Nuestros cuerpos estan tan pegados que siento un aleteo en todo mi cuerpo.
+Me encantaría jugar contigo, cariño.- Dijo contra mis labios, y volvió a besarme, pero esta vez lo hizo con mucha ansiedad.
Gemí y abrió mis piernas con las suyas.
Abrir tanto las piernas para dejar que su cuerpo descansara sobre el mío hizo que me doliera.
Le mordí el labio y gimió, apretando su cadera contra la mía.
Colocó sus manos por detrás de mi espalda y me pegó aún más a él.
Mis pechos estaban aprisionados contra su pecho.
+Hmmm, qué gusto.- Susurró contra mi boca.- Ojalá no te doliera; no me puedo cansar de ti.
Gemí y levanté la pelvis.
+No me tientes, o no podré negarme, y no quiero hacerte más daño.- Dijo con voz ronca.
Intenté quedarme quieta.
-Pues mejor quédate quieto, Hazza.- Susurré contra sus labios.
+No es fácil.- Dijo besándome el cuello.
Cerré los ojos.
-Así no vamos a dormir.- Susurré.
+Lo sé, pero eres demasiado sexy.- Dijo contra mi cuello, y bajó sus manos a mis pechos.
Gemí.
-Hazza...
Subió su boca hasta mis labios para darme otro beso brusco. Me mordió el labio y se colocó a mi lado.
Suspiré.
Estoy sudando.
+Voy al baño... Así no puedo dormir.- Dijo mientras se levantaba, sonriendo.
Harry me miró de arriba a abajo. Sus ojos estaban realmente oscuros... Y su cuerpo. Dios mio. Sus biceps, sus pectorales, sus abdominales, su pelo revuelto... Y esa gran erección. Mi calor aumentó aún más.
Me levanté y fui al baño. Me quité la ropa, me recogí el pelo y entré a la ducha. Me mojé todo el cuerpo con agua fría y salí de la ducha. Me sequé y volví a ponerme la ropa.
Cuando salí del baño, Harry también estaba saliendo del baño.
Se echó boca arriba yo me eché a su lado, entrelazando mis piernas con las suyas y apoyando mi cabeza en su pecho.
+Tienes que dejar de comportarte así, (Tn)_______.-Dijo Harry.
Abrí mucho los ojos y levanté la cabeza para mirarlo.
-¡Pero si yo no he hecho nada!
Rió.
+Sí, sí que lo has hecho. Si me miras así, no puedo evitar comportarme de esta manera.- Dijo abrazándome.
-No te miraría de esa manera si no jugaras conmigo.
Sonrió.
+Pues entonces es inevitable.
Sonreí.
-Venga, es hora de dormir, que mañana hay que despertarse temprano.
Harry asintió.
-Buenas noches, cariño.
+Buenas noches, mi amor.- Susurró, y me dio un beso suave.
Sonreí y me apoyé en su pecho.
El amor que siento por él es indescriptible.
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Bueno, guapis, tal y como lo prometí, hoy es domingo y he subido capitulo. No creo que suba el domingo siguiente sino el otro, pero lo intentaré.
¡Espero que les guste y gracias por leer!
Por cierto, quiero un mínimo de 5 comentarios, eh, porque me están deprimiendo viendo tantas al visitas del blog y tan pocos comentarios.
¡Las adoro!
